“…Siempre estoy buscando en mi mente la mejor idea y cual es la mejor forma de ejecutarla…”
El 23 de febrero Acru dio su primer concierto en Montevideo.
Con tan solo 21 años llenó la sala BJ con cuatrocientas almas desaforadas que agitaron de principio a fin como si no hubiera mañana. Teloneándolo estuvieron hartos representantes locales de ese nuevo mundo del freestyle-rap-milenial como son Gavo, Zeballos y Efé E.
Vino a presentar su segundo L.P llamado #Anonimato. Un segundo trabajo que consolida el camino que comenzó a trazar con su anteriormente aclamado El Origen.
Luego de un par de meses con nuestra web out of line se nos había quedado en el tintero esta nota que tuvimos en el local de la tienda de ropa urbana Kaboa con el MC argento los días posteriores a su concierto. Hoy la rescatamos del cajón para compartirles las impresiones del propio Acru acerca de su visita, el feedback hasta el momento de Anonimato, su combinación con el beatmaker 808 GOD, la escena latinoamericana y el énfasis en el rap que se dfine por sus barras y no por como se coloca en el mercado.
Bonus extra / les compartimos la reseña que nos acercó Oscar Romero a.k.a Oski (VDS/Sudacas) pionero del rap uruguayo, acerca de lo vivido la noche del concierto.
RESEÑA |
Noche lluviosa y húmeda, esa humedad que se olía hasta en la Sala BJ.
Los cuerpos jóvenes absorbieron el olor y lo convirtieron en calor para darle esa energía a Zeballos quien abrió la noche. El punto alto fue cuando todos coreaban Face, Face, Face! Y así apenas dos canciones más se despidió de la noche. Esa noche que estaba en pañales ya que recién eran las doce. Hora en la que cenicienta pierde su zapato. Pero no fue este el caso, el zapato estaba bien puesto y subió Costeros Crew.
De la mano de Pipe, su hermano Cib y Magguer en las bandejas, la gente que salió a tomar aire fue acercándose nuevamente. La gente aplaudió cuando en un impas el mensaje a capella llego. “ Depende solo de nosotros llegar a lo que uno realmente sueña, nadie hará por ti lo que tú tienes que hacer para cumplir lo que sueñas “ “ el poder está en nosotros “ y citando lo que hace unos días paso sobre la pérdida de un hermano de la cultura porque eso pega y pega mucho. Plef presente estuvo en el aplauso de cada uno que en la sala estaba. Y de eso, se trata la vida, se nos va cuando menos lo esperamos, disfrutarla como si fuera siempre nuestro último día.
Azotarla, sacudirla como lo hace quien sabe de castigo, golpear las horas que se van para llenarnos de vida y de eso se encargó Punisher.
Bien parado sobre el escenario, sin dudar un instante de sus métricas fue como calentó la sala a 60 grados Celsius. Pero había que resistir, lo mejor estaba tras bambalinas. Pocos se movieron y los que lo hicieron seguro fue para tomar el aire suficiente para corear rima tras rima acompañando a Acru.
Llego la hora y el aliento se sintió, era como estar en la barra brava de un clásico de Boca y River, de Peñarol y Nacional. Con intro finalizada por Macaya Marqués, sube al escenario el sinónimo de hombre ese que Victor Cruz trajo al mundo. Agradecido Ser, lo es Acru, sabe que el momento que está viviendo no es más que el resultado de descifrar el sufrimiento de su infancia y cómo alquimista convertirlo en felicidad. Esa felicidad que le brilla en cada gota de sudor desprendido sobre cada rima, sobre cada escenario cuando lo pisa.
Contagió a cada alma en la sala tornando las tristezas y rutinas de los presentes en esa sonrisa que su abuela le dejó como receta “ Un día sin sonreír, es un día perdido “ Hoy se gano el día y la noche de todos llenando de ilusión a quienes aún sueñan con vivir de lo que aman. Hoy el ángel volvió a otorgarle la pluma para que escriba en su memoria que en Uruguay se lo respeta, que en Uruguay se lo espera.
