“…Llevé mi bici y recorrí la ciudad de treinta cuadras de largo por catorce de ancho y de unos 17.000 habitantes, Sábado, Domingo y Lunes. Vibré con los colores que iban tomando los muros. Pero también al charlar amenamente con doloreños que exorcisaron, si se quiere, sus fantasmas con los relatos del “demonio”, como uno de ellos lo nombró…Pintó Dolores”
por Fume
¿Y EL PLAN? |
La vida no transcurre por la pantalla de TV, You tube o las redes sociales. De eso te das acabada cuenta al recorrer las calles de la ciudad de Dolores, que acunó en su seno un tornado arrasador hace ya 3 meses. Los medios de comunicación nos inundaron con videos, fotos y entrevistas para ir sacando el foco poco a poco de lo que ya no consideran la noticia caliente. Y así como lo hacen los medios, lo hace su público, adormecido por esta sociedad del entretenimiento. Tanto es así que pocos puedan recordar que en Diciembre de 2012 otro tornado de categoría F2/F3 la había asolado causando tres muertos. Esta vez el golpe fue asestado por uno de categoría probablemente F4 con vientos de hasta 250 km por hora y se llevó con el siete vidas dejando heridas a 250.
La educación es un factor clave y en estos casos de desastres naturales aún más. Tener nociones básicas de como actuar, donde resguardarse y que no hacer son vitales para minimizar el peligro de muerte. Sin temor a equivocarme estoy seguro que nunca se ha implementado un plan de este tipo, espero alguien pueda refutarlo.
ENTRE TODOS |
Como un B.Boy bien dijo en la fiesta de cierre del evento Pintó Dolores: “hay que portarse bien con la Naturaleza“. Porque ella siempre nos hace recordar que insignificantes llegamos a ser cuando desata su furia por tantos daños que le causamos. El cambio climático ya no está a la vuelta de la esquina, hace tres meses golpeó la puerta de Dolores y desnudó la inexistencia de un plan de contención rápido y eficaz por parte del estado. Siendo la sociedad civil la que inmediatamente desbordó los centros de acopio de ayuda. Ante una situación límite se dice que o la familia se desmiembra o se une para siempre. Éste último parece ser el caso de la familia doloreña en que el rico ayudó a reconstruir la casa del pobre y el pobre la del rico, según lo que me contó uno de los afectados.
Pintó Dolores es un intento de crear un entorno de restitución de los espacios destruidos por el tornado, creando un ambiente de esperanza para los ciudadanos. Al movimiento lo formaron más de cincuenta artistas que no movieron dinero sino voluntades para llevar a cabo el fin por el que se nuclearon.
RECORRIENDO |
Llevé mi bici y recorrí la ciudad de 30 cuadras de largo por 14 de ancho y de unos 17.000 habitantes, Sábado, Domingo y Lunes. Vibré con los colores que iban tomando los muros pero también al charlar amenamente con doloreños que exorcisaron, si se quiere, sus fantasmas con los relatos del “demonio”, como uno de ellos lo nombró.
Un hospital con gran parte de su edificación tapada con lonas, un liceo en pésimas condiciones edilicias, casas arruinadas, paredes rajadas, autos destrozados, chapas estrujadas y en lugares tan atípicos como en los árboles. El dolor que uno puede ni siquiera acercarse a sentir en los relatos, son una patada al estómago en cada pedaleada que doy y la sensación que queda mucha por hacer.
EL BÁLZAMO |
Tal vez por haber nacido y vivido en el interior no me sorprendió la amabilidad de la “gente de afuera” como se le decía desde los tiempos del Montevideo amurallado. Igualmente es bueno constatar que ello no ha mutado hacia el desdén del capitalino. Aquí la gente es franca y saluda al sólo contacto con la mirada o un simple movimiento de cabeza. Aquí los niños se acercan con una sonrisa limpia y pura y con el deseo de saberlo todo, siendo un bálsamo que calma los dolores que genera el entorno. Esa amabilidad se volvió agradecimiento en forma de café, galletas, té, chocolate y unas cuantas cosas ricas más a los artistas que intervinieron la ciudad. Con lo que se pudo palear el frío que arreció sobre todo el Sábado.
De los primeros muros marcados poco se respetó y una anarquía de colores se esparció sobre la ciudad regando las calles de látex y aerosol. Las zonas aledañas al puerto y el molino resultaron en talleres multitudinarios. Llegándose incluso a pintar desde balsas sobre el río San Salvador; pero también se pintó en la zona Sur.
El Domingo a la tarde sonaron los acordes de “La vida es un Carnaval” entre otras. Desde la caja de una camioneta una orquesta improvisada acariciaba el corazón de la gente. Algo parecido pasó en los días posteriores al tornado para dar ánimo a una ciudad que parecía ser el escenario de una película bélica.
VOLVEREMOS |
Llegó el Lunes y me tuve que despedir de Dolores con sensaciones encontradas. Por un lado de haber participado de una épica histórica, de una quijotada de artistas que brindaron todo por el pueblo y que regocijaron los corazones del mismo. Pero también con un sentimiento agridulce de no querer volver a esa sociedad del entretenimiento que luego de pasado un evento de tal magnitud, lo pise y deseche como está acostumbrada. Seguramente con el paso de los meses volvamos a esta ciudad pero ese será tema de otra crónica.
Acerca de nuestro colaborador:
Fume es la persona encargada de llevar la fan page en Facebook llamada Montevideo Ciudad Intervenida desde finales del 2012. Una propuesta personal que busca dejar constancia a través de la fotografía, el arte urbano realizado en la ciudad. Contemplando el graffiti y el muralismo principalmente y difundiendo también eventos relacionados al Hip Hop. Desde el año pasado también se incorpora a la producción de los Premios Al Hip Hop. Ayudando con el registro y las sensaciones de lo ocurrido en las calles durante el año en materia de graffiti.